por: un sanmiguelense sin censura.

De turistas y panzones están llenos los panteones,

Que por andar de mirones asoman, ombligos, celulares y pasaportes.

¡Cuidado! que hay viene la catrina por todos los balcones,

Saludando a los sanmiguelenses y llevandose agachones,

Con su gran sombrero tapa a los bravucones,

porque cuando los enfrentan son puros bocones.

La ciudad más cosmopolita, con residentes y nuevos sanmiguelenses, quienes también trabajan y luchan por la ciudad como si fueran siameses.

Hay foráneos que tomaron San Miguel como su hogar,

Pero se les olvida que lo deben respetar.

Ya pusieron el desorden y empezaron a poner sobrenombres,

que ‘el Manchester’, que ‘el Zacatepec’, que ‘las uñas largas’, que ‘los Michoacanos’…

Pareciera que se les olvida que sanmiguelenses y foráneos somos todos hermanos.

Hay quien no entiende la ciudad, se quejan de arribistas y extraños,

Cuando los más quisquillosos son los mismísimos foráneos.

‘El Gringo’, ‘el chilango’, ‘la Leonesa’ y ‘el Michoacano’,

Son palabras que nunca se usaban para denigrar al escribir o al hablar,

Pero los blanquiazules, los pintos y los colorados quisieron verse listos e insultar,

fingiendo ser personas cultas e ingeniosas pero que no son de fiar,

¿O será que los que se creen encargados de hablar, no saben dialogar?

A quien le quede el saco, pongaselo rapidito,

Para que sus seguidores y defensores le echen un ojito,

Mientras les funciona el cerebro para escribir un parrafito,

Porque sin argumentos y puras groserías escriben sin pensar tantito.

Bienvenidos foráneos, gringos, chaparros y peloncitos,

Que la muerte no discrimina, aunque sean los más raritos,

¿Por qué en San Miguel haremos la diferencia?

Si la Catrina también se llevará a los oriundos sanmiguelenses y sin preferencia.